viernes, 16 de diciembre de 2011

Gusti


Nació en Buenos Aires en 1963. Estudió en su ciudad natal diseño y promoción publicitaria. Se trasladó a Europa en 1985. Actualmente reside en Barcelona.  Ha ilustrado  cómic, álbumes  como La mosca, libros… Ha colabora en series animadas para TV. Ha recibido numerosos premios: Premio Iberoamericano de Ilustración, Premio Serra D’Or…. En el año 2006 formó parte de un viaje científico al Ecuador, donde a la manera del siglo XVIII realizó un cuaderno de viajes.
  
Cuaderno de viaje: Ecuador. Factoría K, 2008 (Cuaderno de viaje)
Texto ilustrado al color con anotaciones manuscritas de Gusti. Recoge sus impresiones a la manera del viajero del siglo XVIII y XIX, que con los útiles de dibujo va dando al lector una idea directa de sus precepciones más subjetivas sobre el entorno. La expedición en la que participó se realizó en el 2006 (julio y agosto), fue dirigida por Ruth Muñiz López y recorrió la amazonia ecuatoriana.

sábado, 3 de diciembre de 2011

Alonso Zapico


Nació en Blimea, Asturias, 1981. Trabaja e proyectos educativos. Colabora como ilustrador en diferentes revistas y diarios : Nueva España, Les Noticies, en donde realiza la tira cómica Les petites de Grau... Colabora como ilustrador con diferentes editoriales y agencia de publicidad.
Público en Francia La guerra del profesor Bertenev. Entre sus obras más importantes destaca Café Budapest (2008) sobre el conflicto árabe-israeli y Dublinés (2011) biografía de Joyce. Vive y trabaja en Francia. Su obra se ha publicado en Francia, Polonia… Ha recibido varios premios.

La ruta de Joyce. Bilbao, Astiberri, 2011.
Es el cuaderno del viaje que realizó siguiendo los pasos de Joyce por Europa.  Recorrió Dublín, Tireste, París, Zurich…
“La visita a los museos me producen el “síndrome de Sthendal” no importa si el museo es grande o pequeño o si es un museo de Bellas Artes o el museo de la Trucha.
Así que es mejor parar o tomar café, sacar la libreta y boli, y ordenar un poco las ideas, apunto lo que he visto, lo que me queda por ver, lo que será imposible que vea y un montón de cosas más” (p.81)
http://www.astiberri.com/ficha_prod.php?cod=larutajoyce

sábado, 5 de noviembre de 2011

Emiliano Ramírez Ángel


Nació en Toledo en 1883. Apareció en el “Salón” de Carmen de Burgos “Colombine” en 1907. Obtuvo el premio de la colección “Novela Ilustrada” que dirigía V. Blasco Ibáñez por su novela La Tirana; durante esta época conoció a Rafael Cansinos-Asséns quien traza su semblante en La Novela de un literato como “un hombre modesto, poco bullidor, que introdujo en la literatura un tono menor, muchacheril. Se declaraba discípulo de Galdós y de Martínez Sierra y escribía una prosa limpia, correcta, pero opaca. Había publicado novelas y crónicas de costumbres madrileñas”. En La Esfera escribió numerosas crónicas madrileñistas en la sección titulada “notas madrileñas”. Incluso en una entrevista que mantuvo con Julio Cejador describió su literatura como “frivolidad, optimismo, cierta leve zumbonería, piedad, amor a Madrid –el Madrid actual, humilde y joven– y ternura para pintar la clase media, entre la que vivo...”. Durante 1914 estuvo en París, desde donde mandó una serie de crónicas que publicó La Esfera, allí trabajó para una editorial franco-española dedicada a la publicación de biografías. En estas crónicas describe París comparándolo con Madrid, en una de ellas la titulada París obstáculo dice: “Merece verse la Avenida de la Opera, en cualquier momento; las escaleras subterráneas del “Metro”; los puntos de parada de los “autobús” y tranvías; la misma acera; el último, insignificante “café Biard”. No se hable del pórtico de la bolsa, ni de los grandes almacenes, ni del “carre four” de un barrio cualquiera... Todo corre, todo vibra, todo pasa, todo aturde...
    París retiembla, arde, se agita, resuena en un concertante que parece un desfile, en una inquietud que semeja una huida...”. O bien, cuando describe el barrio de la bohemia parisina en El crepúsculo de Montmatre y su próxima desaparición como “El Montmatre de callejuelas, que trepan por la colina, desaparece, como desaparecieron también los montmartrenses ilusionados, soñadores, amigos de la Luna, del Ajenjo y de la Selección”.
    Colaboró asíduamente en la prensa ilustrada: La Esfera, Mundo Gráfico... Fue redactor-jefe del ABC. César González Ruano en sus Memorias corrobora lo antedicho por Cansinos y por él mismo, describiéndolo como “...tenderito guapo y moreno que hubiera dejado el mostrador por la literatura. Era hombre simpático y que no escribía mal, pero de poco vuelo, como para producir algún cuento correcto o algunas crónicas sentimentales...”. Consiguió en 1924 el premio Mariano de Cavia.
    Una de las principales aficiones de Ramírez Ángel era el coleccionismo de libros y papeles raros y como apunta Cansinos “...era un asiduo visitante de la Feria de Libros, donde buscaba números de revistas antiguas, aleluyas y folletos curiosos de los que poseía una rica colección... en la que figuraban recortes curiosos de periódicos, ya antiguos. Dibujos. Caricaturas, pliegos de aleluyas, romances de cordel, cosas todas raras que el escritor había ido recogiendo por los baratillos del Rastro...”. Padeció toda su vida un úlcera gástrica que se le llevó en Madrid en 1928. La prensa de derechas le hizo unos magníficos funerales “era el escritor de la clase media y a la clase media de la literatura pertenecía.
Ha publicado Enrique Sánchez Lubian en ABC del 26 de febrero del 2011 "Emiliano Ramirez Ángel: perdido en el limbo toledano"

Publicaciones periódicas
Impresiones de viaje: venecianas de ahora.
    En: La Esfera. Madrid. Año 1, n. 14 (4, abril, 1914).
    .
París, obstáculo: la conquista de la acera.
    En: La Esfera. Madrid. Año 1, n. 25 (20, junio, 1914).

Del viejo París: el crepúsculo de Montmatre.
    En: La Esfera. Madrid. Año 1, n. 29 (18, julio, 1914).

París se divierte: las mañanas del bosque de Bolonia.
    En: La Esfera. Madrid. Año 1, n. 30 (2, julio, 1914).

Del París pintoresco: los árboles Robinson.
    En: La Esfera. Madrid. Año 1, n. 33 (15, agosto, 1914).


Félix Ros i Cebrián

Nació en Barcelona en 1912. Utilizó el pseudónimo de Kurt von Nörvich. Antes de la guerra civil frecuentó la amistad de los intelectuales de la época, fue muy amigo de Corpus Barga, quien intercedió por él en varias ocasiones  ante la autoridades republicanas. Durante la Guerra Civil formó parte de la Quinta Columna, que pasaba información a los sublevado, por ello fue recluido en la checa “Preventorio D” de Barcelona. Fue liberado por los Nacionales. Formó parte del grupo de escritores falangistas, junto a  Luys Santa Marina, Foxá, Sánchez-Mazas, Eugenio Montes …. Acabada la guerra junto a Carlos Sentís y Martínez Barbeito, asaltó la casa de Juan Ramón Jiménez en Madrid –C/Padilla--, llevándose la biblioteca de este. Tuvo que interceder José María Pemán para que devolviera los libros, quedándose con una cantidad indeterminada de estos.
Colaboró en las más diversas publicaciones antes y después de la Guerra Civil: Lus, Blanco y Negro, ABC, Cruz y Raya, Ya, La Vanguardia… etc. Fue amigo del editor Josep Janés, dirigió la editorial Tartesos de Barcelona.), su obra es muy extensa, escribió poesía, ensayo, crónicas, viajes, teatro original y adaptaciones, adaptaciones teatrales para TV y obras pedagógicas, podemos destacar los siguientes títulos: Preventorio D: ocho meses en el SIM, El paquebot de Noé, Práctica de literaturas no castellanas (Barcelona, 1944. Dio numerosas conferencias tanto en España como en el extranjero, sobre todo en hispanoamerica. Murió en Estambul en 1974.

Libros

Un meridional en Rusia. Barcelona, Luis Miracle, 1936. 224 págs., 18 h. de fot., 19 cm.
Otras ed.:
Madrid, Españolas, 1940. 228 págs., 19 cm.

De la estrella de Oriente, a la Estrella del Norte. Barcelona, Ariel, 1965. 270 págs., 35 fot., 22 cm (Nuestro siglo XX por dentro).

    En el “Decálogo” al lector le dice cuando ha escrito este libro producto de sus vacaciones y que ha salido en algunos diarios de Madrid y Barcelona, así, este libro de compone, como apunta en la apartado “ 4. Importa, pues, reconocer, que, de las 6 partes de esta obra, y prescindiendo de la 3ª –cuyos capítulos acuciaron singladuras independientes entre sí– y de la 6ª, o colofón, las 4 restantes significan 4 viviciones del afortunado emborronacuartillas... El primer conjunto, “Un mundo árabe”, tres semanas por marzo y abril del 60. Los segundos, cuarto y quinto, veraneos, respectivamente, en 1961, 1962 y 1963.
    Un resumen –dada su dimensión– de la mayoría de estas notas apareció en los diarios “La Vanguardia”, de Barcelona y “ABC”, de Madrid (Sigo orden cronológico).
    La relativa vejez de los primeros capítulos la justificará aquella esclavitud que he mencionado. Pues hube de aproximarme al tema en ojeos muy consecuentes, pero nada consecutivos. Notario veloz, además, de cuanto recorrí, me preocupaban sedimentaciones y comprobaciones in textu... No olvido, no, que acaban que transcurrir muchos meses desde el último viaje; pero otro, y fundamental, a América (sobre el que podrá leer también pronto), más ciertos rebrotes teatrales –a los que, incorregible, vuelvo de cuando en cuando– , me impidieron, la revisión inmediata de este volumen, ¡Ojo, con lo que la “revisión”! Nada añadí al texto inicial, aparte inicial, aparte lo ahorrado a “La Vanguardia” y “ABC”. Al revés: he suprimido repeticiones, que esmaltaron, inevitablemente, lo que se publicó en páginas y en épocas tan dispares como se indica.” (pág. 14).

    Itinerario: “Un mundo árabe”: Jerusalén, mar Muerto, Tebas, El Cairo, Alejandría. “Peregrino en Grecia”: Olympia, Atenas, La Argólida, Creta, Rodas. “Más Mediterráneo”: La Valletta Mallorca, Costa Brava. “Por una sóla vez”: Londres, Oslo, Copenhage, Estocolmo, Helsinki, Hamburgo. “Vuelta a lo de uno”: Eleusis, Delfos, Baalbek, Beirut, Israel.

35 años de la URSS. Madrid, G. del Toro, 1971. 268 págs., 16 h. de fot. b/n., 22 cm.
     Contiene: Un meridional en Rusia: (1936) págs. 15-165; Crucero N-NE: (1969) págs. 169-253; Aquel meridional en la Rusia meridional: (1971) págs. 257-268.

     En “Carta urgente” dice: “Creo necesaria una explicación, por el libro aparentemente tan heterogéneo como el que se abre ante tus ojos.
     En octubre-noviembre de 1935 realicé un viaje a la Unión Soviética que originó un montón de folios dividido en diecisiete capítulos. Estudiante universitario entonces, colaboraba yo no poco en la prensa, me pareció aquello adecuado para “Ya” –a la sazón diario de la tarde muy movido y en papel color rosa–, y, desde Barcelona, ciudad de mi empadronamiento me vine a Madrid, me recibió el director de dicho periódico (a quien no conocía), mi actualmente buen amigo Vicente Gállego, leyó –o mandó leer– el mamotreto y aceptó publicarlo en condiciones correctas. Por desdicha todo esto ocurría a principios de febrero, hubo elecciones a cortes, triunfaron crepitantemente las izquierdas, en el “Ya” no les llegaba la camisa al cuerpo (las cosas no aparecían fáciles para un diario de su tendencia...) y Gállego me escribió una larga carta, que conservo, renunciando a “atreverse” con lo antes aceptado. Lo llevé, en vista de los cual, a “La Vanguardia”, de Barcelona, periódico a cuya redacción perteneciese dos años antes, y su director Agustín Calvet, Gaziel, aceptó mi original asimismo pero pagando poco e “invitándome” (también conservo la carta) a tres o cuatro modificaciones que no estuve dispuesto –como jamás lo he estado, a través de mi carrera de escritor– a hacer. La honradez es fundamental.
     Ante cuyos fracasos acudí, no me arrepiento, al editor Luis Miracle. Y así apareció, con buenos grabados y llamativa portada, mi tercer libro, Un meridional en Rusia. Apareció... veinte días antes del 18 de julio; aunque no creo que mis queridos reventadores se atrevan a aludir aquí la relación de causa y efecto.
     Tuvimos un éxito loco. A los cuatro meses se habían liquidado –sólo en zona roja, pues no dio tiempo a distribuirlos por toda España– los 3.000 ejemplares. “Si lo leen, está usted perdido”, solía decirme L. M. Casi, casi, llegué a estarlo, de verdad; pero el casi es buena tabla de salvación, según tantos años después lo cuento.
     Al terminar la Guerra Civil, Dionisio Cano, director de las desaparecidas “Ediciones Españolas”, me llamó, firmamos otro contrato (del que, por cierto, jamás llegué a ver un céntimo), hizo un largo tiraje de la obra, y, ¡milagro! También en pocos meses quedaba absolutamente agotada. Hoy no se encuentra ni en librerías de ocasión. Hace poco en uno de los catálogos con que algunas de estas habitualmente me informan, figuraba un ejemplar de su primera edición (que costaba 5 pesetas) marcado en 675. Casi  –¡otra vez, el “casi”!– lo que cobré yo... claro, eran otros tiempos.
     (...) Ahora, amigo, verás que Un meridional en Rusia forma parte del menú que se te ofrece (...) Ocurre que, desde entonces, he vuelto dos veces al país de los Soviets: en 1969 y en 1970.
     (...) Divido el volumen en tres partes. La primera la constituye la nueva edición de Un meridional..., otra vez sin añadir ni quitar coma. La segunda, doce artículos publicados en “La Vanguardia” en noviembre-diciembre del 69. La tercera, dos de los de una última serie que acaba de ver la luz en “ABC”. Reconozco que en la mentada ristra de doce algunos tocan el mundo burgués; pero, como van cuatro de la Unión Soviética, dos de Polonia (país que también desmenuza Un meridional...) y uno con el Berlín Oriental por medio...” (págs. 11-12).
    
De Acapulco a Nueva York pasando por los Balcanes. Madrid, Prensa Española, 1971. 230 págs., 27 fot., 21 cm (Los tres dados).
    En las páginas dedicadas al lector dice “Conviene no confundir: no todo cuanto se publica en los diarios (primer refugio de mis subsiguientes folios) es material periodístico. Estas páginas fueron, desde la primera a la último, pensadas para volumen. Lo que sucede es que encontrar editor para tales temas continúa resultando en España difícil, al menos para mí, sin previo destripe en la Prensa; por el que los amigos me sonrojan:
    —¡ Santo Dios, lo que viajas! ¿De dónde acabas de llegar?
    Así te ruego, amigo lector, aunque estoy en que ya tú lo harás, que no juzgues este tipo como narcisista cónclave de lo que nació para independiente..., sino como intento sistematizado de comprender a seres y países distantes de nosotros. Algo, que ni inmuta al escritor español común, tan alérgico a fronteras.
    En cualquier caso, ahí van antecedentes:
    “Ciñéndole el talle a América” derivada la misión que la encomendó el Instituto de Cultura Hispánica en los meses de mayo, junio y julio de 1964; cursillos y conferencias sobre literatura española en universidades y ateneos, por todos los países de México a Venezuela (menos El Salvador, a última hora); “Crucero de cercanías”, una invitación de “Internacional Expreso” en 1967; “El mundo balcánico” de otras dos a bordo del “Cabo San Roque” –1966 y 1967–, en la primera de las cuales tocó Yugoslavia; Rumania y Bulgaria, en la segunda. Por fin, “Paleto en Nueva York” fue posible gracias a una beca de investigación concedida por la Fundación Juan March (1968) para diez meses en el extranjero: de los que Manhattan consumió dos.
    Mis apuntes respectivos aparecieron en “ABC”, de Madrid; “TeleXprés”, de Barcelona; “Ya” de Madrid; otra vez “ABC” y “La Vanguardia” de Barcelona.”
    Itinerario: “Ciñéndole el talle a América”: México, Acapulco, Puebla, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Caracas. “Crucero de Cercanía”: Ajaccio, Nápoles, Roma, Génova, Cannes. “El mundo Balcánico”: Yugoslavia, Split, Trogir, Duebrovnik, Belgrado, Bucarest, Rumania, Bulgaria, Sofia. “Nueva York para paletos”: Nueva York, Washington.

jueves, 15 de septiembre de 2011

Jacobo Cortines


Itálica Famosa. [Edición, estudio y selección de textos de] Jacobo Cortines. Sevilla, Diputación de Sevilla, 2010 (cultura e identidad)
Esta obra surge como iniciativa para conmemorar el MMCC de la Fundación de Itálica (Sevilla).Esta recopilación de textos no ofrece una imagen histórico literaria de la ciudad sevillana. Desde la poesía reivindicando al poeta como descubridor del alma de la ciudad, la reflexión que este hace de las ruinas como elemento del pasado e imagen del transitar de las obras realizadas por el hombre, así se registran poemas de F. Herrera, Hernándo Soria, Juan de Armijo… etc. Hasta la prosa donde se hace principal hincapié en los libros de viajes y descripciones pintoresco-artísticas de la ciudad, se remonta en la recopilación a los autores latinos como Apiano y Julio César, pero sobre todo se detiene en la visión que los viajeros españoles y extranjeros dan de la ciudad.

martes, 13 de septiembre de 2011

José L. Fernández-Rúa

La España del XIX: vista por los viajeros extranjeros. [Por] José Luis Fernández-Rúa. Madrid, Publicaciones Españolas, 1955. 2 hs. de fot. + 39 págs. (Temas españoles 194).

Índice: El encuentro del tiempo perdido, revisión de equipajes, cortesía de los aduaneros, otros ejemplos, la molestia del viaje, las posadas y la mala mesa, aparece el garbanzo, el gracejo de Madrid, la fiesta nacional, la política de los políticos, Narváez, verdad y mentira del bandolerismo, tierra inglesa bajo el cielo español, el carlísmo y los carlistas, la importancia de ser barbero, el sereno y otras anécdotas, extravagancia, los españoles.

lunes, 15 de agosto de 2011

El Víbora

El n.  46 El Víbora : comix para supervivientes. Hace una revisión del viaje comix a través de las historias de Nazario, Max, Baxter, Iranzo, Balaguer... y un relato de Leguineche en el que cuenta su experiencia "un diente de oro" en la frontera de Birmania. Un encuentro con el viaje undergraound.
"EL VIAJE ES UN SACO LLENO DE OCASIONES PERDIDAS", un proverbio Tuareg.


lunes, 1 de agosto de 2011

Antonio Manuel Campoy

Viaje por España. Madrid, Biblioteca Nueva, 1962. 420 págs.

Está organizada como una guía de viajes, se divide por provincias y en ellas intercala diferentes comentarios de los viajeros que recorrieron Iberia, desde Edmondo d'Amicis a Ticknor. La obra se divide en tres partes: Introducción, Las ciudades, Las gentes. Contiene una interesante bibliografía.
se dice sobre el viaje en la p. 12 "Los viajes evitan, entre otros, el peligro de las miopías localistas, que consisten en tomar medidas universales las que únicamente son de parroquia. Viajando se aprende que las glorias y las flaquezas del mundo son más de las que imaginábamos... Lo que importa es viajar, airearse el alma y estrenar más horizontes..."

F. Flores Arroyuelo

La España del siglo XX vista por extranjeros.[Selección y prólogo] F. Flores Arroyuelo. Madrid, Cuadernos para el Diálogo, 1972. 404 págs. (divulgación universitaria. Cuestiones españolas, 42).
Recopilación de textos de viajeros por España en el siglo XX: Regoyos, Chamberlain,  Ward, Eremburg, Dos Passos... Sus viajes se agrupan en diferentes temáticas, que se reflejan en el índice: La España negra; El atraso de España; La Verdad sobre España; El alma de España; España tal como es; Estampas de viaje; Rocinante vuelve al camino; España República de trabajadores; la decadencia del anarquismo.

domingo, 31 de julio de 2011

Miguel de Unamuno

Nació en Bilbao en 1864. Estudió Filosofía y Letras en Madrid, en cuya universidad se doctoró. Catedrático de Griego en la Universidad de Salamanca, en 1901 se le nombró rector de dicha universidad. Al igual que sus coetáneos ocupó gran parte de su tiempo libre en viajar, conocer la Península y en especial España. Unamuno no escribió un libro de viaje sino una serie de artículos, crónicas y poemas donde expone su visión de España y Portugal. La explica a lectores hispanoamericanos, al ser publicados la mayoría de sus crónicas en La Nación, Caras y Caretas y en La España de Buenos Aires, los menos se insertaron en los diarios españoles El Sol y El Imparcial. Utilizó tanto la poesía como la prosa para decir lo que ve y lo que siente.

Al igual que Azorín y Zozaya, España estará constantemente presente en su obra, pero no con la viveza de sus crónicas y poemas de viaje. Si en sus novelas y ensayos, apenas describe el paisaje, es en sus viajes donde Unamuno utilizará este recurso y lo adereza con datos históricos, sociológicos y deja que sus ideas se vayan transformado en ciudades, pueblos, ríos, plazas, calles...
   
 El primer libro que dedica a la descripción es Paisajes (1902) pero es en su segundo libro De mi país (1903) en donde contrapone el paisaje castellano y el vasco. 


Las excursiones realizadas entre 1906 y 1909 las recoge en su primer libro de viajes, en el que reúne una serie colaboraciones en la prensa argentina y española, Por tierras de Portugal y España (1911) doce artículos dedicados a Portugal y lo portugués y catorce a España y lo español. Las crónicas no sólo describen las ciudades, los grandes pueblos, ríos, intelectuales, artistas... sino que lo mezcla en un todo intertextual, donde lo que domina es la idea sobre el texto


Su cuarto libro, último publicado en vida, Andanzas y visiones españolas (1922) registra artículos de excursiones realizadas entre 1911 y 1922, especialmente por España, aunque hay alguno que hace referencia a “Coimbra” y otros se refieren a los Estados Unidos y Francia, son viajes que recorren la mitad norte Peninsular. Azorín dice que “Páginas hay en Andanzas en que se percibe con profunda emoción todo el ambiente tradicional y severo de las pequeñas ciudades españolas. [...] El paisaje de Unamuno se halla impregnado de espiritualidad, casi no son paisajes, casi no vemos lo que pretende pintar el autor. Vemos el colorario moral, místico muchas veces, que el autor apoyándose en las ciudades, en los bosques, en las montañas...”.
    
Su último libro de viajes, el quinto, es una recopilación de textos diseminados en diferentes Publicaciones periódicas y que no se incluyeron en ninguna de las colecciones anteriores, fue realizada por M. García Blanco y editada con el título Paisajes del Alma (1979) la mayoría de estos artículos son posteriores a 1922 a excepción de “Pompeya” fechado en 1892.
    
Se enfrentó a la dictadura de Miguel Primo de Rivera y del rey Alfonso XIII, por ello se le deportó a la isla de Fuerteventura en 1923. Escribió, en esa isla y posteriormente en París donde fue llevado por el gobierno francés, De Fuerteventura a París: diario íntimo de confinamiento y destierro vertido en sonetos (Paris, 1925) en dicho libro no sólo describe la isla que le cobijó durante unos meses, sino que lanza ataques casi panfletarios contra el dictador y el rey, del primero dice que es “Añoso ya y tonto de capirote” y del segundo que “... el seso tiene de sustancia enjuto”. Regresó a España en 1930. Al instaurarse la II República en 1931 se le nombró rector de la Universidad de Salamanca. Al inició de la Guerra Civil tomó partido por los sublevados, por miedo al comunismo, poco después pronunció una conferencia en la que se desdijo, lo que le costó la destitución de todos sus cargos públicos. Murió en Salamanca en 1936


Elias Amézaga recoge las colaboraciones en los diarios en Prensa de Juventud. Madrid, Compañía literaria, 1995. Los textos que se publican son los enviara, entre los quince y veinticuatro años, al El Noticiero de Bilbao,en donde firmaría con diferentes pesudónimos como: Baserritar-bat y Perú el aldeano
Recopilación de diferentes artículos en Madrid, Castilla, Visor, 2001(Letras madrileñas contemporáneas.Con prólogo de Jon Jauristi. Nos acerca a la particular visión que de lo castellano y lo madrileño, intercalando algún artículo sobre el País Vasco




ESTUDIOS







Los materiales que forman este libro tienen como origen la tesis doctoral presentada en la Universidad de Alicante en 1988, con el título Los libros de viajes de Unamuno o el anhelo de un viajero.

"La única literatura que se había dedicado a recorrer el país fijado su atención en las costumbres y los paisajes había sido la literatura extranjera... Los costumbristas españoles limitan su producción a la crítica de los extranjero sin aportar nada a la visión intrahistórica; algo de esa nueva orientación podemos vislumbrar en Somoza y Alarcón..." p. 19-20. Miguel de Unamuno, excursionista y viajero destacado recibe influjo de la Institución Libre de Enseñanza en el apartado de aprecio por los místicos españoles frente a los Austrias y la contrarreforma.




domingo, 3 de julio de 2011

José Luis Castillo-Puche

José Luis Castillo-Puche: un periodista viajero. [Por] Javier chivite Fernandez. Madrid, Fragura, 2009. (Druida).

Nació en Yecla en 1919. Sus primeras novelas las publicó en los años cincuenta, inicia su carrera literaria con Con la muerte al hombro, entre sus libros hay que destacar El libro de las visiones y apariciones, que fue uno de los más apreciados por la crítica y el público, Jeremías, el anarquista, El libro de las visiones y las apariciones. Y una novela sobre la vida de las tropas norteamericanas destacadas en las bases españolas. Paralelo 40 (1963).
  Viajó por África, América y España. Sus experiencias las publicó en los diarios y semanarios en los que trabajó. Se consideró, así  mismo, un viajero que le gustaba el riesgo le “encantaban los viajes, y aún los más catastróficos me sientan mejor que un frasco de vitaminas”. No sólo viajó por el mundo sino también lo hizo por España, sus crónicas las publicó en Pueblo, Ya y en El Español, como su recorrido por el Sudoeste español, en el que compara la isla de Tabarca con una “guitarra” de cuya caja “no sale música”, sino que su costa “tiene bellas ensenadas con playas de fina arena”, con esta crónica y la que hace referencia al “Levante murciano”, quiere dar a conocer a los turistas extranjeros y españoles, algunos parajes más exóticos de la costa mediterránea. Escribió Costa Blanca y la Luz (1964), una guía de viajes para la colección de Noguer “Andar y ver”.




América de cabo a rabo. [Dibujos de] Aurelio Madrid, Cid, 1959. 756 págs., 22 cm.

  Este viaje lo inició en 1957, con una propuesta que hizo al Director del Instituto de Cultura Hispánica, Blas Piñar, para recorrer América, le financiaron el viaje. Salió de Madrid rumbo a Río de Janeiro el 30 de junio de 1957 y regresó el 24 de agosto de 1958 vía San Juan de Puerto Rico. Recorrió América de Sur a Norte. Escribió su viaje en diferentes crónicas, que no ordenó ni publicó hasta su llegada a España. a instancias de Emilio Romero, director del diario Pueblo, proposición que aceptó. Dejó claro que eran impresiones “intuitivas e inmediatas”. Las crónicas del diario se iniciaron en Colombia.
    El libro como su viaje se inicia en Brasil. Su obra la organiza por países, cada capítulo hace referencia a uno de ellos, en primer lugar aparece un mapa y bajo él se registra: superficie, población, exportación, ciudades. Describe los lugares, las gentes que ve, mantiene una especial relación con los exiliados españoles. Describe las ciudades desde el punto de vista del viajero que quiere quedarse, se deja llevar por la intuición, así para él la ciudad de Lima, es una “suculenta ciudad, en la que no es tanto de admirar el balcón volado, la escalinata adornada con fantasías andaluzas, las rejas como cepos románticos, con la desperdigada melancolía de los barrios que acompañan al soñador Rimac, en sus soliloquios místicos y picarescos, con la fuerza intocable de lo puro criollo... Lima gotea voluptuosidad y destila algo más que obediencia en seguir impregnando todavía la manopla y el encaje: Lima refresca y orea constantemente vientos ciudadanos sin llegar a ser plebeyos.”

    Itinerario: Brasil, Urugay, Argentina, Chile, Perú, Ecuador, Colombia, Panamá, Guatemala, Puerto Rico, Estados Unidos, México.



   
El Congo estrena libertad. Madrid, Biblioteca Nueva, 1961. 206 págs., 18 h. de fot. b/n., 21 cm.


    Uno de los grandes conflictos africanos de finales de los años cincuenta y que terminó en 1960 fue la independencia de Congo Belga, esta guerra concentró uno de los mayores despliegues informativos occidentales en África. Castillo Puche, fue corresponsal del diario Pueblo, donde envió sus crónicas puntualmente hasta la finalización del conflicto en 1960, un año más tarde las recopiló y publicó en El Congo estrena libertad (1961). En el “Aviso a los lectores”, dice que es un libro de viajes, donde su experiencia se adorna con opiniones políticas y datos histórico-sociológicos. En el libro revive las imágenes de los soldados con las manos cortadas, las monjas con la cara pegada a la pared: el terror de los blancos. Cree que los libros de viajes son “flor de un día, compendio de instantáneas, sensaciones y tablado pasajeros.”

    Entre otras descripciones la de la ciudad de Brazzabille, la capital de la colonia y del estado independiente “A todo lo largo de las márgenes del Congo y entre colinas invadidas por hecatombes de árboles de todos los tamaños y colores, se reparte y prolonga, esta ciudad, en donde el gran edificio, el bello hotel, la soberbia iglesia y los modernos edificios públicos se alinean a lo largo de las avenidas, dando un poco la espalda a los multitudinarios barrios donde viven lo indígenas, entre cercas de alambre y tablas. El barrio negro principal de Brazzaville se llama Poto-poto que quiere decir barro o fango rojizo.”

    Itinerario: Douala, Brazzaville, rio Congo, Leopolville, Ruanda.

 Tierra de Campos: mas bien mares de tierra. Palencia, Diputación Provincial de Palencia, 1961. 30 págs., 16 cm.
   

Artículos en diarios y revistas

Nomadeando por el Sáhara español.
    En: El Español. Madrid. 2ª época, n. 238 (21-27 junio, 1953), págs. 32-38; n. 240 (5-11 julio, 1953), págs. 18-23; n. 242 (19-25 julio, 1953), págs. 18-24.
    Recorre parte del territorio español en África. Su viaje se inicia en Sidi-Ifni, describe la zona Sur del protectorado español, en los últimos años de la colonia, dice que su capital es como un “poblado [que] resulta bonito y, sobre todo pintoresco. Las calles parecen trazadas por un tasador árabe más bien rectas y esquinadas como fórmulas del Corán. Lo peor de todo son las cuestas que se deja uno el alma en ellas de tanto subir y bajar. Aparte de esto, la ciudad podría pasar por una estación de veraneantes, y si hubiera arbolado y un balneario con su “cura de aguas” podríamos creer que estabamos en Cestona”. Ifni parece significar “lo que era y no existe”, probablemente el agua.
    Trata de recorrer “El Aiun, Smara, Guelta de Zmmur, Villa Cisneros...”, se detiene en las ciudades del Sáhara como Villa Bens, que se encuentra cerca del cabo Juby. Intenta definir culturalmente a los habitantes del Sáhara, sus costumbres, sus supersticiones, hace especial mención de los “Halem”, sabios que conocen las tradiciones de las tribus y el Corán, “cada tribu tiene su Halem... la sabiduría de estos Halem está hecha de empirismo y superstición. No deja de ser curioso que entre los árabes todas las cosas tengan exactamente el significado opuesto al que tiene entre nosotros... Lo que para nosotros es de mal agüero para ellos es una señal afortunada. Por ejemplo: que entre ellos nadie dispare a un cuervo, porque es el más alegre mensajero del desierto”. Entre los animales del desierto, las cabras, las ovejas, destaca la importancia del camello, principal medio de locomoción, los describe como un animal raro, con fisonomía de inglés de club y andar enfático y presumido de hijo de faraones.
   
Vieja Tabarca: isla nueva del Sudeste.
    En: El Español. Madrid. N. 17 (9, febrero, 1963), págs. 6, 7.

    “Carreteras, senderos, pinadas, charcas, islotes en estas costas alicantinas, murcianas y almerienses están experimentando estos días la fiebre más desquiciadora de su historia. Ni fenicios, ni romanos, ni árabes pasaron por estas latitudes con tanta impaciencia, afán y celo como pasan hoy los compradores de tierras, los técnicos en complejos turísticos, los diseñadores de planes de urbanización.
    (...) Desde la amena y sonriente Santa Pola nos hemos internado por las laderas de una montaña hasta llegar casi al pie del faro...” (pág. 6).
   
Levante murciano: costa de la luz.
    En: El Español. Madrid. N. 22 (16, marzo, 1963), págs. 6-8.
    “Vamos a echar un vistazo a las playas de los pueblos mineros de Murcia. Aconsejo al viajero o al lector que no se precipite. Encontraremos más de un motivo de sorpresa.
    Muchas veces tendremos que ponernos la mano ante los ojos como visera. Y no tan sólo para no ser deslumbrados por este sol de la llamada Costa Blanca –que más bien, de San Pedro de Pinatar para abajo, tendremos que comenzar a llamarla Costa de la Luz, como ya la llama todo el mundo desde nuestro compañero Ismael Galiana la ha bautizado– sino también para poder pensar un poco con mayor comodidad.”

viernes, 1 de julio de 2011

Viajeros por Almeria

Almería vista por los viajeros: De Münzer a Pemán (1494-1958) [Por] José Domingo Lentisco Puche, M. Desamparados Martínez San Pedro..., Prólogo, Carlos García-Romeral Pérez. Almería, Instituto de Estudios Almerienses, Diputanción de Almería, 2007. 794 págs. (Instituto de Estudios Almerienses. Colección Historia, 13). Índices
La imagen de Almería ha cambiado a lo largo del tiempo, los acontecimientos históricos y el desarrollo de los medios de comunicación han permitido su el conocomiento de esta parte del Reino de Granada por parte de españoles y extranjeros. Su organización cronológica permite a los editores, mostrar al lector: la biografía del autor, fragmentos de la obra citada y una colección iconográfica, que representa ediciones del libro y  representaciones de la época que recoge el viaje.
La recopilación principal se hace de los autores extranjeros por España en el siglo XIX. Se mezclan  autores españoles y extranjeros, has 146 registos. Se han publicado diversas reseñas en la prensa local: El Ideal 





sábado, 11 de junio de 2011

Carlos García-Romeral Pérez

Diccionario biobibliográfico de viajeros por España y Portugal. Madrid, Ollero y Ramos, 2010

Recoge información de libros de viajes y viajeros desde la Edad Media hasta mediado el siglo XX. Se registran 2.062 autores, 100 obras anómimas. y 16.000 referencias bibliográficas. Además en las referencias se añade el itinerario realizado por el viajero, la localización en las bibliotecas, en algunos casos se incluyen los enlaces a reproducciones electrónicas y en otros casos se realiza una recopilación de las traducciones. La obra trata de dar una imagen del libro de viaje sobre España en todos sus ámbitos.
"Asi nos encontrarmos con diferentes visiones de la Península Ibérica dependiendo de la procedencia del viajero y de la época en la que viajó. Se puede seguir la idea que de lo ibérico se ha tenido a través de la historia".

miércoles, 8 de junio de 2011

Viajeros italianos España

Viajeros italianos en España : Cádiz en los libros de viajes del siglo XIX. [Por] Soledad Porras Castro. Cádiz, Universidad de Cádiz, 2011. Contiene un CD con una selección de textos traducidos al español. ( mFF, Monografía  FIlosofía, Filología y Lingüística).
Índice: Primera parte, Concepto y actualización de la literatura de viaje. Viajeros italianos en España, el cap. II recoge una cronología de viajeros italianos en España y en el apartado 3 hace una reseña a los viajeros españoles en Italia (pág. 59-66). Segunda parte, Cádiz en los libros de viajes del siglo XIX. Autores y Textos; en el cap. IV hace una relación de los siguiente autores: Antonio Conca, Adolfo Foresta, Luigi Serristori, Elena Mario, Gustavo Strafforello, Cesare Imperiale si Sant'Angelo y Edmondo d'Amici.  Hace una pequeña reseña biografíca de los autores señalando las impresiones más relevantes que sobre España tienen sus relatos de viajes.


domingo, 23 de enero de 2011

Washington Irving

Joan Arocas
Cuentos de la Alhambra. Ahmed Al.Kamel el peregrino del Amor. [adaptación de un cuento por] Fariñas y dibujado a color por Joan Arocas.
En: Totem. N. 45.

viernes, 21 de enero de 2011

José María Solé

Nació en A Coruña en 1951. Licenciado en Ciencias Políticas y Sociología. Ha escrito obras de divulgación histórica, colaborado en revistas como Tiempo de historia e Historia 16 y fundado Aventura de la historia y Descubrir el arte.
http://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Mar%C3%ADa_Sol%C3%A9


La tierra del Breve pie: los viajeros contemplan a la mujer española. Veintisieteletras, 2007.
Busca textos sobre la mujer española, en las obras de los viajeros por España, desde Estrabón a Maurice Barres. “El recopilador se ha dedicado a buscar reunir y, por último, dar cohesión a una serie de testimonios que sirvieran de material informativo”, este trabajo lo realiza a través de 10 capítulos: I. Desde los confines del mundo… II. Al corazón del imperio. III Pícaros ilustrados. (S. XVIII). IV. Vísperas de la revolución (1775-1800). V. Mujeres en Guerra (Guerra de la Independencia). VI. Para delicia de los románticos (1809-1833). VII. Una turbadora curiosidad (1830-1850). VIII. Ojos labios y pies. IX. Decimonónicos vecinos. X. Oriente en Occidente.
En cada capítulo hace referencia a una serie de viajeros, así en el cap. VI “para delicia de románticos” describe el viaje y referencias a la mujer de Byron, Lantier, Victor Hugo, Charles Rochfort Scott….
http://www.veintisieteletras.com/titulo.php?id=16

jueves, 20 de enero de 2011

Miguelanxo Prado

Nació en A Coruña en 1958. Desde finales los años 70 empieza a colaborar en diferentes revistas de cómic: Comix Internacional.... Ha ilustrado  numerosos libros para niños y jóvenes.  La mayor parte de su obra se ha editado en la editorial Norma.

http://www.miguelanxoprado.com/


Carta de Lisboa = une lettre trouvée à Lisbone = a letter from Lisbon. [En colaboración con] con Eric Sarner. Meriberica.
Se ha editado en tres lenguas y recoge los lugares más pintorescos de la ciudad de Lisboa el hilo conductor del texto lo marcan las imágenes. 

Belo Horizonte. Norma, 2006. 80 págs.
cuaderno sobre una de las ciudades brasileñas más importantes. Fue un trabajo propuesto por la editorial brasileña Casa 21, en colaboración con el Ayuntamiento de la ciudad. No quisó que fuera un libro de estampas sino que contara la ciudad, se inspiró para ello en la obra de Jano sobre Rio de Janeiro. Dice en la contracubierta "No es un libro de rincones bonitos como el de Lisboa". Es un libro de contrastes que quiere resaltar el color local



miércoles, 19 de enero de 2011

Viajeros por Castilla y León

Viajeras extranjeras en Castilla La Vieja y León. Siglo XIX. [Prólogo de] Eva Díaz Pérez. Región Editorial, 2008.
Durante el siglo XIX se inicia en España el viaje de la mujer. El Romanticismo trae consigo la renovación de las costumbres. No es que las mujeres viajen solas, aunque en excepciones si lo hacen, sino que forman parte de grupos de viajeros bien acompañando a sus maridos, padres o amantes. En muchos casos no se limitan a ser meras comparsas sino que forman parte activa del viaje, bien escribiendo cartas a familiares contando sus experiencias, ilustrando libros o escribiendo articulos y libros viajeros. Se registran las experiencias de 22 viajeras: Lady Elizabeth Holland, Duquesa de Abarantes, Caroline Elizabeth Wilde Cushings, Isabel Pesado de Mier, ... entre otras.
http://www.nortecastilla.es/20090328/cultura/castilla-leon-siglo-relatos-20090328.html
http://www.elmundo.es/elmundo/2009/01/28/castillayleon/1233172652.html

José Ruiz Mas

Libros de viajes en Lengua inglesa por la España del siglo XX. [Prólogo de] Carmelo Medina.Grupo Editorial Universitario, 2003.
Estudia la relación entre el viajero inglés del siglo XX y la historia de España más reciente: La mayoría de edad del rey Alfonso XIII (1902-1923), la dictadura del general Primo de Rivera (1923-1930), la II República española (1931-1936), La Guerra Civil española (1036-1939), la Década pre-turística del regimen del general Franco (1940-1951), el periplo turístico del regimen del general Franco (1952-1975), la España democrática (1976-2000).
Contiene una interesante bibliografía págs. 168-211.
"Disecciona tanto la imafgen en sus multiples facetas que han forjado los viajeros extranjeros a partir de su convicencia con los españoles y como esa visión se ha transmitido en sus relatos a sus lectores compatriotas" (contraportada).

Ediciones digitales:
RUIZ MÁS, José: La guardia civil en los libros de viajes en lengua inglesa. [Tesis doctoral]. Málaga Universidad de Málaga, 1998.
HTTP://WWW.SCI.UMA.ES/BBLDOC/TESISUMA/16788539.PDF